La avalancha de productos de diseño dirigidos a los particulares en las oficinas de los bancos tiene los días contados. El supervisor europeo de los mercados (ESMA) y la CNMV han lanzado un aviso a navegantes. Una nueva norma evitará que pueda colocar depósitos o bonos estructurados, por ejemplo, sin tener que someter al cliente a un test de conveniencia.
Los bancos deberán aplicar un filtro a los clientes que contraten depósitos o bonos estructurados.
Fuente: Cinco Días